Entrevista a Josué Carrión, director ejecutivo del Centro de Liderazgo ELIDER y experto en la formación de jóvenes líderes
“Los buenos hábitos formados en la juventud marcan toda la diferencia”. Esta frase del célebre Aristóteles nos muestra que, a lo largo de la historia, la formación de los jóvenes ha sido y es de vital importancia para que ellos consigan un futuro pleno. Con el fin de profundizar en el tema, nos contactamos con Josué Carrión, quien cuenta con más de 10 años formando jóvenes líderes y, además, es el director ejecutivo a.i. de Proforhum, entidad que coordina el Centro de Liderazgo ELIDER.
¿Por qué es importante que los adolescentes, en esta etapa de su vida, profundicen en el autoconocimiento?
Imagina que tu proyecto de vida es un edificio. Para construirlo, lo primero que necesitas es hacer los planos. Una vez que los tienes listos, pasas a la parte ejecutiva en la que pones lo principal: los cimientos, porque si no el edificio se va a caer. La adolescencia es la etapa de vida que corresponde a establecer los cimientos. En ese sentido, los cimientos más fuertes son los buenos hábitos que una persona tenga. También es cierto que todos tenemos malos hábitos, pero es de sabios reconocerlos y trabajar en ellos para que no jueguen en contra nuestra.
¿Y qué vendrían a ser los hábitos?
Los hábitos son acciones que uno realiza con cierta frecuencia. Cada vez que tú los pones en práctica, te es más fácil realizarlos que la vez anterior, así hasta que eventualmente se vuelva una costumbre. Esa es la naturaleza de los hábitos: conforme los repites, se hace más fácil que la vez previa.
Ahora, si es un buen hábito, no hay ningún problema. El problema está con los malos hábitos. Si no los tienes identificados y no los trabajas, será un obstáculo para ti porque cada vez te será más fácil caer en ellos.
¿Cómo impactan en nuestra vida?
Para ver su impacto, tenemos que traducirlos a la vida cotidiana: a qué hora me levanto, cuánto tiempo me demoro en ducharme, cuánto tiempo le dedico al estudio, cómo es mi alimentación, etc. En cada momento de nuestra vida están presentes los hábitos.
Entonces, también influyen en nuestra toma de decisiones, porque si continuamente nos dejamos llevar por los malos hábitos, eso impactará negativamente en nuestro futuro. ¿Por qué es importante cultivar buenos hábitos para tomar mejores decisiones?
Tomando en cuenta el proyecto de vida, cada etapa está concatenada con la siguiente etapa. De la infancia hasta la adolescencia, de la adolescencia a la adultez joven, de la adultez joven a la adultez mayor, etc. Entonces, hay cierta conexión entre cada una de estas etapas. Por ende, las decisiones que tomemos hoy nos deben ayudar a adquirir los hábitos que vamos a necesitar en el futuro.
Por ejemplo, si hoy estoy en tercero de secundaria y mi meta es estudiar la carrera de Derecho, debo pensar: ¿qué puedo hacer ahora que pueda servirme para cumplir ese propósito? Entonces, luego de reflexionar comienzo a tomar aquellas decisiones que me lleven hacia ese rumbo.
¿Podrías darnos algunos tips para cultivar buenos hábitos?
Primero, siéntate y haz una lista de cuáles crees que son tus buenos y malos hábitos. Luego piensa cómo puedes desarrollar los buenos y gestionar los malos. El consejo de oro que te puedo dar es que empieces por lo chiquito, no trates de abarcar todos a la misma vez. La clave es escoger un hábito a trabajar y concentrarse en ese. Respecto al tiempo, hay ciertas discrepancias, pero muchos coinciden en que si logras practicar un hábito todos los días durante dos meses, ya forma parte de tu vida.
También, creo que el autoconocimiento es clave, porque es lo que te va a permitir identificar tus buenos y malos hábitos. Además, te ayudará a saber en qué eres bueno y qué cosas no se te dan tan bien, conocerás qué te gusta y qué no, qué quieres y qué no quieres. Si tú eres capaz de plasmar todos estos elementos mencionados, ponerlos por escrito y plantearte metas concretas a alcanzar, estás en un excelente camino.
¿Y cómo trabajar estos malos hábitos?
Como ya había mencionado, lo primero es identificar cuáles son y ver en qué circunstancias se dan. Si te detienes a pensar en las cosas cotidianas y pequeñas de cada día, te vas a dar cuenta. Dirás: “Oye, estoy haciendo esto acá, pero ya me he puesto a pensar al respecto y me he dado cuenta de que esto no es bueno, es un mal hábito”.
¿Puedes darnos un ejemplo?
Claro. Por ejemplo, no lavar tus platos después de haber almorzado. Para adquirir el buen hábito debes proponerte cada día cumplir con lavar los platos. Puede pasar un día que digas: “Hoy no los lavé, pero mañana si lo voy a hacer”, y lo haces. De repente pasado mañana tampoco lo haces porque te olvidas, pero si ya te has planteado ese propósito y trabajas poquito a poquito y día tras día, puedes superar ese mal hábito.
Por último, ¿podrías comentarme sobre los cursos que tiene Elider?
Justo ahora, en verano, tendremos el taller de Buenos Hábitos y Autoconocimiento donde vamos a llevar a todos los participantes a hacer eso: autoconocerse. Al mismo tiempo, los ayudaremos a que puedan identificar sus hábitos y darles estrategias para que puedan seguir desarrollando los buenos y puedan adquirir hábitos que desean adquirir. Y como todos tenemos malos hábitos, en alguna medida, también vamos a ayudar a que los jóvenes puedan reconocerlos para luego trabajarlos.
Conoce más sobre los talleres de Elider - Verano 2024:
Taller de Oratoria y Debate:
• Dirigido a alumnos de 1ro a 5to de secundaria
• Del 30 de enero al 08 de febrero (martes, miércoles y jueves)
• Horario: de 10:00 am a 1:00 pm
Taller de Buenos hábitos y Autoconocimiento:
• Dirigido a alumnos de 1ro a 5to de secundaria
• Del 13 al 22 de febrero (martes, miércoles y jueves)
• Horario: de 10:00 am a 1:00 pm
Si deseas más información, visita su web (www.elider.org.pe), escribe al 995 361 445 ó a elider@proforhum.org.pe
.png)
Comments